En el 70% de los pacientes hay cambios neuropsiquiátricos y cognitivos, con labilidad emocional, agitación, depresión, irritabilidad, ansiedad, ataques de pánico, paranoia e insomnio. La depresión ocurre en dos tercios de los pacientes; algunos pacientes pueden presentarse eufóricos o maníacos. También se afectan el aprendizaje, la atención y la memoria a corto plazo. El hipercortisolismo se asocia con disminución del volumen del encéfalo en general, y después de su corrección, la resolución de los síntomas psiquiátricos es variable.