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Ley 32: Juegue con las fantasías de la gente, Alejandro Ignacio Aguilar…
Ley 32: Juegue con las fantasías de la gente
criterio
la vida es tan dura y
problemática que aquellas personas capaces de inventar ilusiones
apelar a las fantasías de las
masas es una fuente inmensa de poder
muchas veces se evita la verdad porque
suele ser dura y desagradable
observancia de la ley
muchas de las familias nobles de Venecia fueron a la bancarrota, y los Bancos comenzaron a cerrar sus puertas
con "Il Bragadino", comenzaron a soñar que la ciudad volvería a prosperar
el descubrimiento del Nuevo Mundo trasladó el poder
comercial a los países atlánticos de Europa
Bragadino arribó a Venecia, todos comenzaron a dedicarse a la alquimia, seguía recibiendo regalos de todas partes
la ciudad-estado de Venecia fue próspera durante tanto tiempo, sentían que su pequeña república tenía la fortuna de su parte
los enemigos del alquimista le exigieron una prueba de sus habilidades, abandonó la ciudad en Múnich, reanudó allí la confortable vida que había llevado en Venecia
claves para alcanzar el poder
la clave para imponer la fantasía es la distancia
nunca sea demasiado directo al describir
su fantasía, manténgala vaga, indefinida
una transformación repentina traerá aparejado un cambio total de la fortuna, obviando, de un solo golpe mágico
deje que su víctima se aproxime lo suficiente como para ver y sentirse tentada, pero, manténgala lo bastante lejos como para que siga soñando y deseando
nunca se deje distraer por los brillantes retratos que la gente pinta de su persona, hurgue y trate de encontrar lo que de veras los aprisiona
interpretación
ganó algún dinero con sus fraudes alquímicos, se hizo una fama que sabía pronto se conocería en Venecia
usted deberá ser fuente de placer para quienes lo rodean, y el placer surge del arte de adecuarse a las fantasías de la gente
Mamugnà había vivido durante varios años en Venecia antes de reencarnarse en el alquimista Bragadino
invalidación
deberá manejarla con habilidad y nunca acercarse
demasiado a un punto en que le exijan que demuestre resultados concretos
nunca cometa el error de imaginar que la fantasía siempre es fantástica
la fantasía, por lo general, contiene un elemento lúdico: el público
Alejandro Ignacio Aguilar Huanca