“En el nivel discursivo se reconoce cada vez más la importancia de las capacidades psicosociales para un desempeño competente en la vida laboral. El éxito profesional está vinculado, sin dudas, a la competencia técnica, a las capacidades y habilidades necesarias para detectar los problemas, analizarlos y darles una solución adecuada. Estas competencias son imprescindibles, pero no suficientes. Un profesional exitoso requiere, además de una fuerte formación técnica, una sólida formación para comunicarse oralmente y por escrito, coordinar equipos de trabajo, tomar decisiones sostenibles, negociar y acordar”.