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Aprender a pensar históricamente - Coggle Diagram
Aprender a pensar históricamente
Enseñanza de la historia
Exige y demanda en los currículos educativos la presencia de (ambos, pero más aún los de segundo orden):
Contenidos sustantivos o de PRIMER ORDEN que responden a las preguntas:
¿Qué?
¿Quién?
¿Cuándo?
¿Dónde?
Contenidos estratégicos o de
SEGUNDO ORDEN
(habilidades propias del historiador) que se concretan en:
Búsqueda de información
Selección de la información
Tratamiento de fuentes históricas
La empatía o la perspectiva histórica
Pensamiento histórico
Es el proceso creativo que realizan los historiadores para interpretar las fuentes del pasado y generar las narrativas históricas. Para su desarrollo se debe tener en cuenta los siguientes conceptos clave:
Relevancia histórica
Fuentes
Cambio y continuidad
Causas y consecuencias
Perspectiva histórica
Dimensión ética de la historia
Enseñanza de la historia moviliza habilidades que deben actuar en 4 ámbitos:
Planteamiento de problemas históricos
Presentar el significado del pasado y su conocimiento como una realidad en construcción continua a partir de interrogantes de investigación.
Análisis y obtención de evidencias
A partir de fuentes y pruebas históricas. Involucra la cuestión de ¿cómo conocer el pasado?, y de reconocimiento de la historia como una disciplina que permite estudiarlo a partir de evidencias.
Desarrollo de una conciencia histórica
Entendida como la capacidad para interrelacionar fenómenos del pasado y del presente.
Construcción o representación narrativa del pasado histórico
Como la capacidad para comunicar verbalmente, de forma oral o escrita, relatos o explicaciones argumentadas sobre el pasado construidas de forma racional utilizando relaciones causales basadas en pruebas o evidencias históricas.
Constituyentes o básicos (o pilares) del pensamiento histórico:
Capacidad de plantear problemas históricos en base a su relevancia e impacto en las sociedades
El concepto de relevancia histórica implica la capacidad de interrogarnos sobre qué y quién del pasado vale la pena ser recordado y estudiado.
Evitar una historia memorística y enciclopédica para enseñar una historia más formativa y reflexiva.
Argumentación histórica y la correcta articulación del discurso a través del uso crítico de fuentes (lo que implica necesariamente el desarrollo de la causalidad).
El uso de fuentes está relacionado con la transmisión del conocimiento histórico de una forma compleja, pues su buen uso implica:
Correcta argumentación
Capacidad de plantear causas y consecuencias
Comprensión de los cambios y permanencias de un proceso histórico desde una perspectiva multifactorial
Conexión del pasado con el presente (conciencia histórica).
Supone desarrollar la noción de que todo presente tiene su origen en el pasado; la certeza de que las sociedades están sujetas a transformaciones; que estas transformaciones constituyen las condiciones del presente; y que cada individuo tiene un papel en el proceso de transformación social, y por lo tanto el pasado forma parte del propio individuo.