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Crónica de la Psico deflación - Coggle Diagram
Crónica de la Psico deflación
21 de febrero
Al regresar de Lisboa, una escena inesperada en el aeropuerto.
En la entrada hay dos humanos completamente cubiertos con un traje blanco, con un casco luminiscente y una pistola termómetro.
Se acercan a cada pasajero, lo detienen, apuntan la luz violeta a su frente, controlan la temperatura y lo dejan ir.
28 de febrero
La ciudad está silenciosa.
¿Y si esta fuera la vía de salida que no conseguíamos encontrar, y que ahora se nos presenta en forma de una epidemia psíquica, de un virus lingüístico generado por un biovirus?
Lo que provoca pánico es que el virus escapa a nuestro
saber: no lo conoce la medicina, no lo conoce el sistema.
2 de marzo
La nada se traga una cosa tras otra.
No hay pánico, no hay miedo, sino silencio.
El efecto del virus radica en la parálisis
relacional que propaga.
Hace tiempo que la economía mundial ha
concluido su parábola expansiva.
Ahora el virus semiótico nos está ayudando
a la transición hacia la inmovilidad.
3 de marzo
En la segunda mitad de 2019, el cuerpo planetario
entró en convulsión.
El cuerpo planetario estaba preso de espasmos que
la mente no sabía guiar.
El capitalismo es una axiomática, es decir, funciona
sobre la base de una premisa no comprobada.
Existe un lenguaje capaz de enunciar el exterior del lenguaje, no hay ninguna posibilidad de destruir el sistema.
La única salida es la muerte. Solo después de la muerte se podrá comenzar a vivir.
No estamos preparados culturalmente para pensar el
estancamiento como condición de largo plazo.
4 de marzo
No sabíamos cómo salir del cadáver del Capital.
Ahora el virus desinfla la burbuja de la aceleración.
Hace tiempo que el capitalismo se encontraba en un
estado de estancamiento irremediable.
5 de marzo
La crisis proviene del cuerpo.
La desmovilización general del coronavirus es un síntoma del estancamiento, incluso antes de ser una causa del mismo.
La caída repentina de la tensión que decide por todos. Psicodeflación.
6 de marzo
El virus que obliga a todos a quedarse en casa,
pero no bloquea la circulación de las mercancías.
El coronavirus no es una amenaza para la economía neoliberal, sino que crea el ambiente perfecto para
esa ideología.
El miedo a una pandemia es más peligroso que el
propio virus.
Pronto nacerá una forma más peligrosa de capitalismo,
que contará con un mayor control y una mayor
purificación de las poblaciones
7 de marzo
La energía se retira del cuerpo social, y la
política muestra su impotencia constitutiva
El biovirus prolifera en el cuerpo
estresado de la humanidad global.
8 de marzo
El coronavirus entró en nuestra vida,
como un peligro personal.
La tasa de transmisibilidad del
coronavirus es de cero punto ochenta.
9 de marzo
Las unidades de terapia intensiva están al borde del colapso.
A partir de los datos se puede ver cómo ha habido una
contracción progresiva de las camas a escala nacional.
10 de marzo
Somos olas del mismo mar, hojas del mismo árbol,
flores del mismo jardín.
Esto está escrito en cajas que contienen barbijos
que llegan de China, y que Europa ha rechazado.
11 de marzo
El último paciente con coronavirus fue dado de alta de los hospitales construidos rápidamente para contener la afluencia.
12 de marzo
Italia. Todo el país entra en cuarentena.
Solo las farmacias y los mercados de
alimentos pueden permanecer abiertos.
Trump usó la expresión «foreign virus».
13 de marzo
El colapso, luego las largas vacaciones. Nadie puede
decir cómo saldremos de esta.
Podríamos salir, como alguno predice, bajo las
condiciones de un estado tecno-totalitario perfecto.
Ahora podríamos muy bien pasar a una condición de
aislamiento permanente de los individuos.
La nueva generación podría internalizar el terror
del cuerpo de los otros.
No podemos saber cómo saldremos de la pandemia.
Podríamos salir de ella definitivamente solos, agresivos, competitivos.
Pero, por el contrario, podríamos salir de ella con un gran
deseo de abrazar: solidaridad social, contacto, igualdad.