Posteriormente, durante la Edad Media, la estadística no tuvo grandes avances. Sin embargo, en la Edad Moderna se elaboraría el primer censo estadístico moderno y la primera tabla de probabilidades de edades, ambos sucesos en el siglo XVII. Luego, hacia el siglo XX, se comenzaron a incorporar herramientas matemáticas provenientes de la teoría de la probabilidad a la estadística. Esto, principalmente por los aportes de Kolmogorov y Borel.