La glomerulonefritis posestreptocócica es causada por una infección previa con cepas nefritogénicas específicas del estreptococo beta-hemolítico del grupo A. La presentación clínica varía desde hematuria microscópica asintomática hasta el síndrome nefrítico agudo completo, caracterizado por orina de color rojo a marrón, proteinuria (que puede alcanzar el rango nefrótico), edema, hipertensión y lesión renal aguda. El pronóstico generalmente es favorable, especialmente en niños, pero en algunos casos, el pronóstico a largo plazo no es benigno.