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LA CULTURA COMO RESPUESTA CONTRA-HEGEMÓNICA - Coggle Diagram
LA CULTURA COMO RESPUESTA CONTRA-HEGEMÓNICA
La cultura como construcción dialéctica
Se ve como un resultado, respuesta y como una creación continua del ser humano.
se nutre de la realidad siendo una fuente que da motivos para la producción simbólica.
*Importante-No olvidar
:*
El carácter social
Construido de la cultura.
como una construcción dialéctica
permite el entendimiento de los procesos del cambio cultural
El sentido dialéctico de la cultura
PERMITE
Un acercamiento vital al ser humano.
Cultura e historicidad
La cultura no puede construirse por encima de la dialéctica socio histórica.
Para comprender un sistema cultural es necesario situarlo históricamente.
La cultura no es una herencia biológica, es una construcción social situada históricamente, como consecuencia de un producto histórico.
La cultura surge como respuesta a un proceso del desarrollo de la historia humana.
Dimensión política de la cultura
Es un escenario de conflictos y luchas por el control de significaciones sociales.
Es un escenario de luchas de sentido por la vida y por cambiar la vida.
La cultura no solo se ha convertido en un problema político
SINO
Posee una dimensión política vital.
La insurgencia simbólica
Este proceso expresa la lucha de los pueblos indios y las diversidades sociales
Como diría Amilcar Cabral
Los pueblos que pretenden movilizarse y luchar son pueblos que conservan su memoria colectiva y su cultura
Cuando existe nuevas condiciones históricas también se tiene que presentar insurgencia simbólica contra el poder
Esto se da cuando las personas
Son capaces de construir sus propios diálogos y realizan propuestas dejando en claro que otras personas no las puede hacer por ellas
Debido a la opresión que sentían las personas realizaron varias actividades
Por ejemplo
Caminatas, huelgas, dentro de estas luchas de resistencia en la cual cuestionaban lo que que hacían lo que estaban en el poder
Y lamentablemente estas luchas no lograron transformar el poder porque no solo se necesitaba de resientancia.
La resistencia es una condición histórica para los pueblos que fueron discriminados, marginados
La usurpación simbólica
Las sociedades tienen la necesidad de justificar su:
pasado, presente, y orígenes
Y lo hacen a partir de recursos naturales.
Para una eficacia simbólica se requiere una dominación de los imaginarios
Dominación de los imaginarios
Un mundo de representaciones
El universo de los sentidos
La usurpación de la memoria
Mediante la usurpación de símbolos y los significados se construye un sentido de lo real
Permite
poder naturalizar las desigualdades, mostrar el orden imaginario que ha construido como el único orden.
Ejemplo:
La mitificación y la sacralización que el poder ha hecho de la democracia y el desarrollo.
Cultura, diversidad, pluralidad, alteridad y diferencia
La actual globalización deja en evidencia que estamos asistiendo a un proceso de desarrollo desigual y combinado del capitalismo mientras, se intenta la construcción de un proyecto de cultura planetaria homogeneizante.
Hay evidencia la existencia de un proceso de insurgencia de lo cultural que se expresa a través de la preocupación sobre temáticas como: lo multiétnico
, la multiculturalidad, la pluriculturalidad, la interculturalidad, la diversidad y la diferencia.
Todas estas expresiones demuestran que ha llegado a su fin una visión unitaria y evolucionista unilineal de la historia. Hoy han entrado en crisis los modelos de centralidad absoluta, que han pretendido construir formas homogeneizantes de mirar la realidad y la cultura.
Esa visión homogeneizante de la cultura ha atravesado la práctica de la antropología, hoy está cada vez más claro que la antropología es la ciencia de la diversidad, la pluralidad y la diferencia, de la alteridad, la otredad.
El reconocimiento de la riqueza de la diversidad, de la pluralidad y la diferencia, a pesar de haber existido siempre, es un hecho reciente, resultante de un proceso de acumulación histórica de la acción sociopolítica de actores sociales.
Cuando hablamos de cultura no podemos hacerlo desde perspectivas homogeneizantes, sino desde la mirada de la diversidad, la pluralidad, la alteridad y la diferencia, es ahí en donde está la riqueza de la humanidad, porque ninguna cultura es igual a otra.
Al interior de una misma cultura que aparentemente es “homogénea” se expresan manifestaciones y representaciones culturales con características propias y diferenciadas.
Por ejemplo: dentro de la nacionalidad quichua de la sierra no son lo mismo los otavalos, los salasacas, los tiguas o los cañaris; y todavía más: al interior de cada uno de esos pueblos, existen diferencias en las comunidades que los constituyen.
El concepto de la diversidad debe ser el eje conductor respecto a la mirada de la realidad sociocultural.
Una cuestión que no conviene olvidar es que la diversidad, la pluralidad y la diferencia, tiene profunda importancia política, dado que cuestionan y rompen la mirada homogeneizante de la civilización dominante que quiere encasillar la riqueza de la vida.