Conclusión: Jesús llegó y transformó la idea que se tenía de Dios, desde lo político, lo económico, lo religioso y lo social, como un rebelde que buscaba dejar un legado y como base ponía el amor a Dios y al prójimo, dejando de lado la riqueza terrenal y buscando la del cielo. Con la muerte en la cruz nos demuestra que hay algo más después de la muerte y que su poder rebasa todas las cosas y su amor por nosotros era tan grande que vino al mundo a vivir como uno de nosotros, dió igualdad, poder y voz a las personas marginadas y rechazadas en su tiempo. TODOS SOMOS HIJOS DE DIOS.