La sociología se ha ocupado sistemáticamente de las normas, por ser una cuestión importante la observación de cómo las personas pueden vivir juntas, a pesar de que las preferencias, deseos, ambiciones, habilidades, comportamientos y la visión del mundo de cada individuo son a veces tan diferentes que incluso pueden ser contradictorios o antagónicos; la existencia de un orden normativo se presenta como la única forma de garantizar la estabilidad y el acuerdo mínimo: como un factor que posibilite la convivencia.