Linneo trató de clasificar a los seres vivos agrupándolos por características físicas obvias, como el número de piernas o la forma de las hojas. Sin embargo con el paso del tiempo y la aparición y evolución de nuevas especies, esta clasificación ha sufrido ciertas modificaciones hasta lo que hoy conocemos en 7 clases o taxones: Reino, Phylum, Clase, Orden, Familia, Género y Especies.