En la situación de los hombres, la aparición de vello de la cara, el engrosamiento de la manzana de adán y el principio de las erecciones suele marcar la primera fase del proceso, a la cual prosigue la generación de espermatozoides y fluidos seminales, las primeras poluciones nocturnas (eyaculaciones involuntarias), así como incremento de los testículos y del miembro viril. Sin embargo, la voz se hace más gruesa (a veces tras un lapso de aflautamiento), el cuerpo humano gana volumen.