Emplatar las comidas inmediatamente y servirlas lo más rápido posible una vez
que se han colocado en los platos.
Exponer los alimentos de forma que no se contaminen con los usuarios de las
zonas de servicio: protegidos mediante vitrinas, film alimentario, recipientes
con tapa. Las vitrinas deben ser refrigeradas, o bien mantener una
temperatura de 65 0C para los alimentos que lo requieran.
Utilizar instrumentos de servicio limpios, lavándolos y desinfectándolos
siempre que la situación lo requiera.
Limpiar las superficies de las mesas después de cada servicio y desinfectarlas
después de cada jornada.
Manipular los cubiertos tomándolos por los mangos y evitar colocar los dedos
en las zonas de vasos, tazas, platos, etc. que estén en contacto con los
alimentos o con la boca del comensal.
Utilizar manteles limpios y, en caso de utilizar servilletas de tela, reemplazarlas
por servilletas limpias para cada.