En cambio, según otros autores, esta rama del derecho comenzó en el siglo XIII, cuando el jurista boloñés Francesco d’Accorso (1225-1293) impuso a los tribunales de la ciudad de Módena el uso, en ciertos casos, de la jurisprudencia boloñesa. Así introdujo por primera vez el principio de la extraterritorialidad del Estado, y fundó la existencia de un derecho privado internacional.