El mundo entero ha sido escenario de profundas transformaciones ocurridas a lo largo del último cuarto de siglo. Aunque algunos autores se refieren al proceso de cambio como la «globalización para subrayar la nueva inter dependencia económica y política que existe entre todos los países, el término se queda corto respecto de la revolución productiva, técnica, cultural y política que abarca hoy a todo el planeta y cuyos alcances y consecuencias apenas empezamos a advertir. En lo económico, la nueva época se caracteriza por la conformación de un mercado global y por una nueva división internacional del trabajo, en la cual juegan un papel fundamental las grandes empresas multinacionales que distribuyen mundialmente las diferentes etapas de la producción.Este cambio impulsa el espectacular brinco económico, a partir de la producción maquiladora, de países como Corea, Taiwan, Honk Kong y Singapur (conocidos como los «cuatro tigres»).