Crear un tejido de contactos nos permitirá vender más y vender mejor. Esta filosofía, especialmente efectiva en el universo emprendedor, nos hará conseguir también mejores precios con los proveedores, así como fidelizar nuevos clientes o ganar buenas recomendaciones sobre nuestros servicios.
Esta red se amasa con constancia y paciencia, pues no es suficiente con sumar adeptos, sino que, además, debemos cuidar nuestra relación con ellos para que se prolongue en el tiempo.