Bajo los ingredientes que conforman la actitud en Terapia Gestalt, la protagonista va entrando en el trabajo, al margen como digo de los juegos de roles, y poco a poco comienza a digerir, a hacerse cargo, a responsabilizarse, a aceptar, a tomar conciencia… a tocar con lo doloroso, la rabia, el sufrimiento y también a aliviarse, porque saberse escuchado es aliviador.