En los pacientes con NAC no grave, que pueden ser tratados ambulatoriamente y que no tienen factores de riesgo de etiología no habitual, un tratamiento adecuado es la amoxicilina por vía oral, en dosis de 1.000 mg/8 horas. Si son jóvenes y se presupone una etiología atípica es adecuado un macrólido, como la eritromicina, claritromicina o azitromicina, también por vía oral. La alternativa a la amoxicilina, en casos de hipersensibilidad, es un macrólido o, preferiblemente, una fluoroquinolona con buena actividad frente a S. pneumoniae (moxifloxacino).