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El Caso de la Señorita Anna O. - Coggle Diagram
El Caso de la Señorita Anna O.
Antes de su enfermedad 21 años, siempre sana, inteligencia sobresaliente y gran intuición; de voluntad enérgica, tenaz y persistente; de carácter compasivo, bondadoso; el elemento sexual no lo tenía desarrollado
Fases de su enfermedad y sus estados de la conciencia
Incubación latente
Desde mediados de julio de 1880 hasta el 10 de diciembre.
Sintomatología
-Contracción manifiesta de la enfermedad
-Psicosis
-Parafasia
-Strabismus convergeits
-Perturbaciones graves de la visión
-Parálisis por contractura en extremidad superior derecha, ambas inferiores, parcial en la extremidad superior izquierda, paresia de la musculatura cervical
-Progresiva reducción de la contractura en las extremidades del lado derecho
Periodo de una mejoría interrumpida por un grave trauma psíquico (muerte del padre) en abril
Padre muere por absceso de peripleuritis en abril de 1881
Existían dos estados de conciencia enteramente separados; alternaban entre sí muy a menudo y sin transición, y fueron separándose cada vez más en el curso de la enfermedad.
En uno de ellos conocía a su contorno, estaba triste y angustiada pero relativamente normal
Tenía dos yoes, el suyo real y uno malo que la constreñía a un comportamiento díscolo.
En el otro alucinaba, se «portaba mal»; arrojaba las almohadas a la gente cada que podía, arrancaba con sus dedos los botones del cubrecamas y la ropa blanca, etc.
Los dos estados se alternaban, desde la mañana las ausencias (es decir, el afloramiento de la «condition seconde») se volvían cada vez más frecuentes, hacia el atardecer.
Los estados ya no diferían, que en uno (el primero) ella era normal y en el segundo alienada, sino que en el primero vivía como los demás en el invierno de 1881-82, mientras que en el segundo vivía en el invierno de 1880-81 y había olvidado por completo todo lo sucedido después.
Período de sonambulismo persistente
Los síntomas siguen hasta diciembre de 1881
Se desarrolló un procedimiento técnico-terapéutico que no dejaba nada que desear en materia de consecuencia lógica y de realización sistemática.
Cada síntoma fue abordado por sí; todo a raíz que había emergido fue relatado a la inversa, comenzando desde el día anterior a aquel en que la paciente cayó en cama y yendo hacia atrás hasta el momento de su primera emergencia; hecho esto, el síntoma quedaba eliminado para siempre.
Progresiva involución de esos estados y fenómenos hasta junio de 1882.
Durante todo el trayecto de la enfermedad subsistieron uno junto al otro los dos estados de conciencia
El primario, la paciente era por entero normal psíquicamente
El estado segundo, la paciente era alienada.