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Interseccionalidad y perspectivas feministas, z - Coggle Diagram
Interseccionalidad y perspectivas feministas
Pensamiento Epistémico de las mujeres indígenas feministas comunitarias
El feminismo comunitario es una recreación y creación de pensamiento político ideológico feminista y cosmogónico, que ha surgido para reinterpretar las realidades de la vida histórica y cotidiana de las mujeres indígenas, dentro del mundo indígena.
La penetración colonial y el entronque de patriarcados
El patriarcado es el sistema de todas las opresiones, todas las explotaciones, todas las violencias, y discriminaciones que vive toda la humanidad (mujeres hombres y personas intersexuales) y la naturaleza, como un sistema históricamente construido sobre el cuerpo sexuado de las mujeres.
El patriarcado originario ancestral se refuncionaliza con toda la penetración del patriarcado occidental, y en esa coyuntura histórica se contextualizan, y van configurando manifestaciones y expresiones propias que son cuna para que se manifieste el nacimiento de la perversidad del racismo, luego el capitalismo, neoliberalismo, globalización y más.
Patriarcado originario ancestral
La colonización es un acontecimiento histórico, estructural transcendental para la vida de opresión de los pueblos y de las mujeres indígenas en particular, que tiene que ver con todo el embate de penetración colonial como una condición para la perpetuidad de las desventajas múltiples de las mujeres indígenas.
La categoría “patriarcado” ha sido tomada como una categoría que permite analizar a lo interno de las relaciones intercomunitarias entre mujeres y hombres, no solo la situación actual basada en relaciones desiguales de poder, sino cómo todas las opresiones están interconectadas con la raíz del sistema de todas las opresiones: el patriarcado.
El patriarcado originario ancestral es un sistema milenario estructural de opresión contra las mujeres originarias o indígenas. Este sistema establece su base de opresión desde su filosofía que norma la heterorealidad cosmogónica como mandato, tanto para la vida de las mujeres y hombres.
Las mujeres se conciben como complementarias en el todo de los hombres para la reproducción social, biológica y cultural, a quienes en su rol establecido les tocaría la reproducción simbólica, material y de pensamiento, para que así ambos de manera complementaria, puedan generar equilibrio para la continuidad de la vida.
Femeninos y masculinos se relacionan entre sí en una dualidad y complementariedad basada en la sexualidad humana heteronormativa.
Las nacionalidades y pueblos indígenas del Abya Yala, son sociedades originarias que se fundan en raíces milenarias, basadas en sus propias filosofías y paradigmas cosmogónicos ancestrales.
Victimización histórica situada
Posición que se asume y se afirma por algunos hombres y mujeres indígenas, acerca de que a partir de 519 años de invasión colonialista, nacen todos los males de los pueblos y nacionalidades indígenas en Abya Yala. Para quienes se asumen desde este planteamiento ese hecho histórico, marca la raíz o nacimiento de todas las opresiones históricas y actuales.
Racismo sentido, internalizado, reproducido
El racismo como la opresión histórica y estructural que deriva del sistema de todas las opresiones, el patriarcado, y al arremeter contra las formas de vida de los pueblos originarios, empezó a instituir un nuevo orden jerárquico de la diferencia como supremacía, poder y control.
La intención del racismo a través de la colonización, fue tan estratégica que logró sentar las bases para que la vida de las mujeres indígenas quedara sumida en la perpetua desventaja, por el hecho de ser mujeres.
Es necesaria la erradicación del racismo naturalizado y entrañado, para crear y recrear el pensamiento pluridimensional como riqueza.
La heterorealidad cosmogónica originaria
Es la norma que establece desde el esencialismo étnico que todas las relaciones de la humanidad y de ésta con el cosmos, está basada en principios y valores como la complementariedad y dualidad heterosexual para la armonización de la vida.
Designadas por la heteronorma cosmogónica las mujeres indígenas asumimos el rol de cuidadoras de la cultura, protectoras, reproductoras y guardianas ancestrales de ese patriarcado originario, y reafirmamos en nuestros cuerpos la heterosexualidad, la maternidad obligatoria, y el pacto ancestral masculino de que las mujeres en continuum, seamos tributarias para la supremacía patriarcal ancestral.
La opresión manifestada contra las mujeres a lo interno de nuestras culturas y cosmovisiones es algo que hay que cuestionar de manera frontal y nombrarla como es: misoginia, expresada y manifestada en las actitudes y prácticas cotidianas más remotas y actuales, contra nuestros cuerpos, nuestros pensamientos, decisiones y acciones.
Se cuestiona la coherencia de igualdad del Ayllu porque las mujeres indígenas desde la costumbre a la actualidad no estamos en igualdad de condiciones en relación a los hombres.
¡Recuperación y defensa de nuestro territorio cuerpo-tierra!
Implica la recuperación consciente de nuestro primer territorio cuerpo, como un acto político emancipatorio y en coherencia feminista con “lo personal es político”, “lo que no se nombra no existe”.
Asumir la corporalidad individual como territorio propio e irrepetible, permite ir fortaleciendo el sentido de afirmación de su existencia de ser y estar en el mundo.
Recuperar y defender el cuerpo, también implica de manera consciente provocar el desmontaje de los pactos masculinos con los que convivimos, implica cuestionar y provocar el desmontaje de nuestros cuerpos femeninos para su libertad.
Es una propuesta feminista que integra la lucha histórica y cotidiana de nuestros pueblos para la recuperación y defensa del territorio tierra, como una garantía de espacio concreto territorial, donde se manifiesta la vida de los cuerpos.
En el planteamiento de recuperación y defensa histórica de mi territorio cuerpo tierra, asumo la recuperación de mi cuerpo expropiado, para generarle vida, alegría vitalidad, placeres y construcción de saberes liberadores para la toma de decisiones y esta potencia la junto con la defensa de mi territorio tierra, porque no concibo este cuerpo de mujer, sin un espacio en la tierra que dignifique mi existencia, y promueva mi vida en plenitud.
Cosmovisión liberadora
Es una propuesta de cómo entendemos, miramos y convivimos con el mundo desde una mirada liberada. Su contenido está hilado con elementos que promueven la equidad cosmogónica en toda la integralidad de la vida, es dinámica y cíclica espiral, está aperturada a deconstrucciones y construcciones.
Establece espacios para la evocación e invocación desde y para las mujeres, a partir de conectarnos entre nosotras con energías pensantes y sintientes que nos revitalizan para las luchas y las alegrías.
Promueve la creación, el arte, la recreación, el ocio, el descanso y la sabiduría del pensamiento. Evoca voces y silencios que intencionalizan la acción de libertad para las conexiones energéticas con el cosmos. Crea símbolos libertarios con contenido feminista, integra un nuevo imaginario de espiritualidad, para una práctica transgresora.
Hilando de colores, con las otras desde donde estemos
Este hilo del pensamiento, de la palabra y de la acción feminista comunitaria me ha llevado a ver la importancia de tejer pensamientos con otras mujeres, sean indígenas de los diversos pueblos originarios, o sean “occidentales”, porque creo que nos conviene a todas, propiciar espacios y encuentros para reflexionarnos, para atrevernos a hacer desmontajes y para construir en colectividad transgresiones y propuestas para una nueva vida.
En la medida que podamos reconocernos de donde partimos para las aboliciones y transformaciones, nos reconoceremos en esa potencia política feminista para la construcción de un nuevo proyecto emancipador, y generaremos acciones posibles para la vida en plenitud de las mujeres, estemos en la montaña, la comunidad, la selva, la ciudad o el otro lado donde se oculta el sol, el occidente.
Feminismo campesino popular
Las demandas de género
En el II Congreso de la CLOC en 1997, las mujeres tuvieron un espacio propio, una asamblea de mujeres para discutir sus temas y reivindicaciones, que les permitió presentar sus decisiones al conjunto del movimiento campesino durante el congreso
Se propusieron como temas la paridad y la transversalidad del género en todo el movimiento. Este debate permitió una construcción política de las propias mujeres, de liderazgo, de formación dentro de la CLOC
Son los inicios de un discurso que se convertirá más adelante en una propuesta estratégica
Ellas entendían que se trataba de una lucha contra el capital y tenían claro que no podían colaborar con ONG que decían que trabajaban el género, que trabajaban con mujeres, pero impedían, por ejemplo, la ocupación de tierras
Un feminismo propio
Se hace habitual el debate de mujeres, se habla de lucha de mujeres, etc., pero lo que sucede es que el sujeto (las mujeres campesinas) quedan invisibilizadas; están al margen. Además, se habla de mujeres en su globalidad, sin una especificidad de la realidad propia de las mujeres campesinas. de ahí cuando se empieza a ver la importancia del feminismo como estrategia de lucha de las mujeres campesinas.
Como campesinas, se parte también de la condición de sentirse mujeres de la clase trabajadora del campo. Lo importante para nosotras en nuestro día a día es no tener acceso a las tierras, que no haya escuelas, no tener transporte, no tener acceso a la salud. Y es a partir de esta realidad que se construye el feminismo campesino. Partimos de la realidad que vivimos las mujeres campesinas
El feminismo campesino popular es una construcción desde las mujeres de base, señalando nuestras demandas y nuestras luchas de forma compartida
Feminismo para transformar
Nuestro feminismo habla de una nueva relación de los seres humanos con la naturaleza, que valora la agricultura campesina y cuestiona el proceso de explotación de la tierra, el acapara miento de tierras y del agua, el extractivismo, es decir, cuestiona la concepción de la naturaleza como un espacio muerto y sin vida
Se trata de rescatar y de crear nuevas formas de vivir que se han perdido con la entrada del capitalismo, debe terminar la jerarquía de poder en las familias campesinas, en los espacios organizativos y en los espacios comunitarios. Hay que romper la sociedad patriarcal donde el hombre se considera el jefe de la familia, el que toma las decisiones, el que define qué hacer y el que recibe y gestiona la compensación económica, cuando es toda la familia la que hace el trabajo productivo y las mujeres, además, también el trabajo reproductivo
En el trabajo productivo, las mujeres somos consideradas ayudantes, secundarias, un apéndice. El trabajo que realizamos debe ser valorado no tan solo en lo productivo sino también en los saberes, que permiten cuidar y reproducir semillas, por ejemplo, o conocer el uso de las hierbas y las plantas medicinales como formas alternativas de medicina integral
El feminismo en LVC
En la VII Conferencia, hemos hablado de cómo esta estrategia política aporta a la construcción de la autonomía, de la emanci pación, de la liberación de las mujeres sin la intención de que las mujeres de África, de Asia o de Europa salieran de la VII Conferencia diciendo que eran feministas campesinas y populares
Hemos detectado mucho interés y ahora son las mismas compañeras de otras regiones las que deben construir este concepto dentro de su propia organización y dentro de su región
Percepción del feminismo
«El género por el género, sin la relación con la clase, no es la lucha de las mujeres campesinas.»
En nuestros debates siempre tenemos en cuenta 3 ejes que deben estar relacionados de forma intrínseca: capital, género y raza. Son los ejes que componen el sistema de explotación y dominación de las mujeres, sobre todo de las campesinas, indígenas y negras
El género por el género, sin la relación con la clase, no es la lucha de las mujeres campesinas. Y es ahí donde vemos que el feminismo abre puertas. Ahora bien, también podemos encontrarnos con un feminismo que reivindique la lucha de las mujeres pero que no hable de clase; y por ello nosotras añadimos la tercera palabra: feminismo campesino y popular. No es el feminismo liberal, no es el feminismo anarquista…, es el feminismo de clase campesina y popular
Interseccionalidad: una herramienta para la justicia de género y la justicia económica
El uso de la interseccionalidad para impulsar los derechos de las mujeres y la igualdad de género
Para que un análisis interseccional resulte útil en el campo del desarrollo, debe nutrirse de las vivencias y las posturas de las mujeres en toda la gama de sus identidades, incluyendo tanto a las del Sur como a las del Norte, y entre estas últimas a las inmigrantes y a las de distintas razas
El modo en que utilicemos la interseccionalidad siempre depende de nuestra posición, de nuestras necesidades y de nuestros objetivos. He aquí una lista de posibles usos:
Al recoger datos empíricos y estadísticos acerca del impacto que tienen las políticas económicas sobre las mujeres, hay que indagar acerca de las experiencias de aquellas que pertenecen a sectores pobres, o a otros grupos étnicos, o a otros grupos particulares identificados
Al establecer las prioridades de un proyecto, hay que destinar recursos a los más marginados, quienes deben haber sido identificados previamente al analizar el entrecruzamiento de distintas formas de discriminación
¿Qué es la interseccionalidad
?
Es una herramienta analítica para estudiar, entender y responder a las maneras en que el género se cruza con otras identidades y cómo estos cruces contribuyen a experiencias únicas de opresión y privilegio
El análisis interseccional tiene como objetivo revelar las variadas identidades, exponer los diferentes tipos de discriminación y desventaja que se dan como consecuencia de la combinación de identidades
Busca abordar las formas en las que el racismo, el patriarcado, la opresión de clase y otros sistemas de discriminación crean desigualdades que estructuran las posiciones relativas de las mujeres.
El análisis interseccional nos ayuda a visualizar cómo convergen distintos tipos de discriminación: en términos de intersección o de superposición de identidades. Más aún, nos ayuda a entender y a establecer el impacto de dicha convergencia en situaciones de oportunidades y acceso a derechos, y a ver cómo las políticas, los programas, los servicios y las leyes que inciden sobre un aspecto de nuestras vidas están inexorablemente vinculadas a los demás
Como consecuencia de sus múltiples identidades, algunas mujeres se ven empujadas a los márgenes y experimentan profundas discriminaciones, mientras que otras se benefician de posiciones más privilegiadas.
El análisis interseccional plantea que no debemos entender la combinación de identidades como una suma que incrementa la propia carga sino como una que produce experiencias sustantivamente diferentes
Interseccionalidad: ¿por qué?
Requerimos herramientas como la interseccionalidad para contrarrestar estas tendencias y ver íntegra la complejidad y especificidad de los asuntos de los derechos de las mujeres y el desarrollo, incluyendo la dimensión estructural y dinámica de la interacción entre distintas políticas e instituciones. Más aún, necesitamos un marco teórico de este tipo para identificar prácticas que encajan con patrones discriminatorios y para distinguirlas de aquellos fenómenos que son idiosincráticos con respecto al actor o la comunidad
Esta manera de describir a través de categorías únicas simplemente no refleja la realidad de que todos tenemos identidades múltiples y, por ende, podemos enfrentar formas de discriminación entrecruzadas. Un enfoque interseccional, en cambio, no presupone encasillar a las personas en alguna categoría rígida para poder reivindicarla
Es una estrategia que sirve para vincular las bases de la discriminación (raza, género, etc.) con el entorno social, económico, político y legal que alimenta la discriminación y que estructura las vivencias de la opresión y del privilegio.
Feminismo interseccional: un feminismo diverso
https://youtu.be/ixOlUfPSl-E
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