Una vez que la persona sintió, percibió, eligió el estímulo, recordó qué es y para qué sirve, entonces se vale del,
pensamiento consciente o cognición
el proceso mental con el que somos capaces de analizar, sintetizar, hacer juicios, tomar
decisiones, crear propuestas, dirigir la acción mental, regular la conducta y controlar nuestras acciones para elaborar y construir lo que se quiere. Éste es el momento en que se aprende.