a) rigurosas, en cuanto a los estudios incluidos (con
criterios de calidad, etc.); b) informativas, esto es, enfocadas hacia problemas reales, tratando de contestar una pregunta claramente delimitada o específica, e idealmente analizando y presentando los datos de la forma que mejor ayude a la toma de decisiones; c) exhaustivas: su objetivo es identificar y utilizar la mayor cantidad posible de información pertinente, sin introducir sesgos (de publicación, de selección, etc.), y d) explícitas, ya que todos los
métodos utilizados en la revisión deben describirse con suficiente detalle.