CAPITULO 9: TAMAÑO, CICLO DE VIDA Y DECLIVE DE LA ORGANIZACIÓN
La centralización hace referencia al grado de la jerarquía con autoridad para tomar elecciones.
En las empresas centralizadas, las elecciones tienden a tomarse en el grado preeminente.
En las descentralizadas, las elecciones semejantes se tomarían en un grado más bajo.
Enorme. Son necesarios considerables recursos y economías de escala para que muchas empresas logren competir a grado universal.
Pequeña. El argumento opuesto plantea que diminuto es precioso, ya que los requerimientos cruciales para el triunfo en una economía universal son la función de contestación y la flexibilidad en los mercados bastante dinámicos.
La pequeña escala puede dar ventajas significativas en términos de una actitud instantánea a las necesidades variables del comprador y a las condiciones cambiantes del ámbito y del mercado.
Emprendedora. Al principio, la organización es pequeña, no es burocrática y es como un show de solamente una persona.
La alta gerencia otorga la composición y el sistema de control.
La energía organizacional está dedicada a la supervivencia y a la producción de un solo producto o servicio.
Formalización. En este punto, la organización está entrando a la fase de madurez. Emergen las propiedades burocráticas.
La organización incorpora equipos de personal de apoyo, formaliza los métodos e instituye una jerarquía clara y una separación del trabajo.
En la fase de formalización, las empresas además tienen la posibilidad de desarrollar productos complementarios para dar una línea de productos completa.
La innovación se puede conseguir estableciendo un departamento separado de averiguación y desarrollo.
Preparación. La organización madura es enorme y burocrática, con extensos sistemas de control, normas y métodos.
Los gerentes de la organización intentan desarrollar una orientación al equipo en la burocracia, con el objeto de impedir una burocratización adicional.