Una noche de Carnaval de 1544, en Sevilla Don Juan Tenorio y Don Luis Mejía, discuten por saber quién de los dos es el más malvado, para acabar con la discusión ambos deciden hacer una apuesta. La apuesta consiste en volver a reunirse dentro de un año y así conocer cuál de los dos se había sido más malvado, quién se había batido en más duelos o quién había burlado a mas doncellas.
Sevilla año 1545, noche de Carnavales y final de la apuesta que ambos jóvenes habían comenzado un año antes. Don Juan Tenorio y Don Luis Mejía se vuelven a encontrar para comprobar los respectivas hazañas. La apuesta pactada un año antes, había causado un gran escándalo en la ciudad Sevillana.
De la apuesta es Don Juan el que sale claro vencedor, pues es el que ha matado en duelo a más hombres y conquistado a más doncellas. Esta victoria no es aceptada por Don Luis Mejía, quien le propone un nuevo reto, para aceptar su victoria. Ante el revuelo se presentan los alguaciles, arrestando a los dos nobles. El primero en salir del arresto es Don Luis, quien rápidamente llega a casa de Doña Ana, su prometida, para rogarla que se mantenga fuerte y firme ante Don Juan, quien intentará seducirla.