La escuela como institución social, tiene la tarea de formar en ciudadanía, a través de lo cual genera las condiciones necesarias para que la socialización ocurra, es decir, garantiza las libertades para que se pueda ejercer la ciudadanía de forma natural y espontánea, formando personas que se auto-identifican con sus derechos, los promueven, alcanzan un sentido de lo público y buscan garantizar el mantenimiento de las condiciones para una sana convivencia.