Posee dos variantes que son:
El oxígeno gaseoso, O2, es indispensable para la vida; es necesario para quemar com- bustibles fósiles y obtener así energía, y se consume en el metabolismo humano. En ambos procesos se desprende dióxido de carbono y agua como productos colaterales. El oxígeno constituye el 21% en volumen del aire, y el 49.5% en peso de la corteza terrestre.
Su otra forma alotrópica o es el ozono, cuya fórmula es O3. Es más reac- tivo que el oxígeno ordinario y se forma a partir de oxígeno en un arco eléctrico, por ejemplo, en el sistema de encendido de un motor eléctrico. También se produce ozono por la acción de la luz ultravioleta en el oxígeno; a él se debe el aroma “fresco” del aire durante las tormentas eléctricas.