3ra. línea: es la construcción social de
los ideales de justicia, que no
considera desde el plano ético
sino en su dimensión social,
y de la que concluye que la
fundamentación de los derechos
humanos ya no debe seguir siendo
"universalista, fundamentalista,
abstracta, supra histórica o
descontextualizada, metafísica,
idealista y de carácter absoluto en
el espacio y en el tiempo"