Permiten la detección sin contacto de materiales conductores y no conductores, como pueden ser madera, vidrio, cartón, plástico, cerámica, fluidos. Está basado en la variación del estímulo de un campo eléctrico, generado en la cara activa por dos electrodos metálicos (como si fuera un condensador abierto). Por lo tanto al acercarse un objeto mide el cambio en la capacitancia, la cual depende de la constante dieléctrica del material, tamaño y distancia.