La mesogestión sanitaria, o gestión de las instituciones de salud, se realiza a través de la coordinación y motivación efectiva de los integrantes para operativizar el cumplimiento de los objetivos sanitarios, orientados al logro.
En esta gestión existe un soporte disciplinario, que requiere como condición prioritaria la coordinación armónica de otros servicios de soporte tales como finanzas, marketing, proyectos, planificación y salud laboral, que conforman y participan de los servicios y productos sanitarios, de forma interrelacionada.