Marx es el primer gran intelectual posmoderno, porque es antihumanista y porque define el progreso como liberación de la naturaleza, no como realización de una concepción del hombre. Su concepción de la totalidad varía según los textos y hasta según las etapas de su vida, pero hay una unidad en su obra, el materialismo y, por consiguiente, la lucha contra el subjetivismo.