Después de una secuencia de discos aclamados por la crítica y con buena aceptación del público, entraron en una etapa de decadencia creativa, propiciada por sus propios excesos, a finales de agosto «Angie» comienza a trepar a la cima de las listas de popularidad. Esta canción, inspirada en Anita Pallenberg, los situó de nuevo en los primeros lugares de las listas en toda América, Europa y Asia, dándoles otro éxito a nivel internacional. A pesar del éxito comercial de la banda, Mick Taylor se sentía frustrado e insatisfecho profesionalmente por los constantes roces con Richards y la falta de créditos en las canciones, pese a que ayudó a Jagger con la composición y grabación de las canciones del disco anterior. Cerca del final de este año, se mostraba impaciente por la falta de giras y por el estancamiento de la banda.