Please enable JavaScript.
Coggle requires JavaScript to display documents.
Nomenclatura de Compuestos de Coordinación. image, image, image - Coggle…
Nomenclatura de Compuestos de Coordinación.
La Química de la Coordinación pertenece a los campos en los cuales más variaciones está en relación a la nomenclatura de sus recursos debido al enorme desarrollo que ha tenido el asunto
La mejor manera de ilustrar las normas que rigen la Nomenclatura es aplicarla en los ejemplos adecuados:
principales reglas para la nomenclatura de los compuestos de coordinación
Toda entidad de coordinación se redacta entre corchetes cuadrados [] y su carga se redacta como superíndice, con el número previamente del símbolo.
Si el ion central hace parte del anión, su nombre lleva el sufijo -ato, ejemplificando: platinato, cuprato, cromato, argentato (para la plata), aurato (para el oro), etcétera.
Si el ion central hace parte del catión, o de una unidad compleja molecular (sin carga), entonces el nombre del metal no se modifica.
El nombre de los complicados moleculares es un solo vocablo.
principales reglas para la nomenclatura de los compuestos de coordinación
La fórmula de un compuesto de coordinación se redacta en la misma forma que cualquier otro compuesto, primero el catión y después el anión. No obstante, el anión se denomina primero y después el catión, como en el NaCl, cloruro de sodio. Si el anión está construido por bastante más de un átomo, su terminación al nombrarlo es -ato.
Los nombres de los ligantes neutros y catiónicos principalmente no se modifican. Los nombres de los ligantes aniónicos terminan en -o, así sea -uro o -ato, con exclusión de ciertos equipos que al actuar como ligantes muestran un nombre particular, como por ejemplo:
En la fórmula de la entidad de coordinación se redacta primero el ion central, luego los ligantes aniónicos en orden alfabético según el primer signo de su fórmula y después los ligantes neutros, siguiendo el orden alfabético ya dicho.
En la entidad de coordinación se nombran primero los ligantes en el orden alfabético de sus nombres (sin considerar los prefijos que indican su número) y al final el ion central, indicando el estado de oxidación de este último con números romanos en paréntesis y sin dejar espacio entre ellos.
Alfred Werner, logró descubrirnos el planeta de los complicados, hasta el momento bastante misterioso, debido a su fantástico iniciativa de tener en importancia bastante más de una valencia en un átomo. La primera parte de su teoría se divulgó en el año 1893, y viene resumida en 3 postulados:
La parte importante de los recursos químicos tienen 2 tipos de valencia, estando de esta forma una valencia primaria y una secundaria (actualmente popular como número de coordinación). Esta última se representa por una línea que indique el enlace de coordinación.
Los elementos tienden a tener en cuenta tanto su valencia primaria como la secundaria.
El número de coordinación o valencia secundaria, define posiciones del espacio.