• Entender y comprender lenguaje y comunicación de la infancia (lenguaje no-verbal, juegos, gestos).
• Empatía y flexibilidad, para el progreso del tratamiento.
• Aceptar todos los afectos del niño y evitar uso de preguntas directas.
•Habilidad para manejar la ansiedad, jugar, uso de imaginación y fantasía, y contar con buena memoria.