La psicología social se centra en el poder de la situación, el poder de la persona, es decir, lo que se decide para sí, la importancia de la cognición, es decir, la interpretación subjetiva que podamos entender, y la aplicabilidad de los principios de la psicología social, como el bienestar emocional, la disminución de los prejuicios, la salud, la búsqueda de paz, etc.