“la cultura consiste en patrones, explícitos o implícitos, de y para la conducta adquiridos y transmitidos mediante símbolos, constituyendo el logro distintivo de los grupos humanos, incluyendo su representación en artefactos; el núcleo esencial de la cultura consiste en ideas tradicionales —es decir, derivadas y seleccionadas históricamente— y en sus valores” (Kroeber y Kluckhohn, 1952, p. 180). En este contexto, señalan la existencia de seis tipos de definiciones, que se muestran en el Cuadro 3.2.