Quemaduras epidérmicas: Destruyen solamente la capa superficial de la piel, la epidermis, produciendo un aspecto enrojecido de la zona lesionada, no exudativo, sin flictenas o ampollas, doloroso molesto e incómodo, muy sensible al tacto llamada ERITEMA. Su curación puede ser espontánea en 4-5 días, mediante reepitelización.