No puedes dejar de criticarte castigándote cuando lo haces. Si observas que estás pensando «Puaj, soy un desastre» y luego piensas «¡Mierda, Emily me dijo que dejara de hacer esto! ¡Soy un desastre!», no resulta demasiado útil, ¿no te parece? Por tanto, cuando veas que estás pensando «Puaj, soy un desastre» o lo que te digas a ti misma cuando las cosas no te salen bien, limítate a observarlo. Observa simplemente que es una mala hierba. No has sido tú quien la ha puesto ahí; se coló por debajo de la valla. Aprovecha la oportunidad para sembrar algo positivo. Por ejemplo, cuando pienses «Puaj, soy un desastre», siembra el pensamiento de «Soy buena». Como hacías con «Estoy segura», «Estoy completa» o «Estoy en casa». Eres buena." - pag 168