La figura del conciliador es su principal distintivo respecto a los otros MASC, ya que tiene una participación activa, es un facilitador, pues tiene que proponer alternativas de solución, es imparcial, debe vigilar que se respeten los derechos humanos de los que intervienen y en su caso lograr un acuerdo que resuelva la controversia, mismo que debe registrarse y prepararlo para la firma de conformidad.