A la hora de desarrollar estrategias de negociación para lograr buenos acuerdos, nos encontramos con varios tipos. Por un lado, están las estrategias distributivas (ganarperder), que consisten en repartirse los recursos de modo que sea lo más ventajoso posible de acuerdo a los intereses de cada una de las partes. Por otro lado, están las estrategias integrativas (ganar-ganar), que consisten en no dejar nada sobre la mesa, ningún recurso sin repartir, y haberlo hecho de la manera más creativa posible.