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VALORACIÓN DE LOS ESPACIOS SEGUROS PARA FAVORECER LA MOVILIDAD DE LOS…
VALORACIÓN DE LOS ESPACIOS SEGUROS PARA FAVORECER LA MOVILIDAD DE LOS NIÑOS Y NIÑAS
Para poner en marcha una actividad motriz, tenemos que tener en cuenta una serie de parámetros que van a determinar considerablemente la experiencia motora. Estos parámetros son:
El movimiento.
El espacio.
El tiempo.
Los objetos.
La relación con los demás.
El espacio es uno de los parámetros que va a ofrecer al niño la libertad de moverse en relación al resto de parámetros. Es decir, las experiencias motrices van proporcionando al niño informaciones sobre la ocupación del espacio, sobre la orientación de su cuerpo y de los objetos (Arnaiz, 1999).
Cada uno de los espacios de aprendizaje se deben crear partiendo de las necesidades de los niños previamente identificadas (Nicole du Saussure, citado en Baena y Granero, 2015).
Necesidades afectivas.
Se deben aportar puntos de referencia físicos y humanos que den seguridad al niño/a. El niño/a debe encontrar en los espacios un cierto orden y estabilidad que le ofrezca un clima agradable y acogedor.
Necesidad de autonomía.
En esta etapa el niño/a pasa de una total dependencia del adulto a un grado de autonomía importante. Podemos precaver: espacios en donde el niño/a pueda actuar libremente, eliminando barreras arquitectónicas.
Necesidad de movimiento.
El niño/a en sus primeros pasos va adquiriendo un progresivo control de su cuerpo y adquiere habilidades motóricas muy importantes para su posterior desarrollo: el dominio de la marcha, control postural, lateralidad. Es por ello que en la creación de espacios libres y amplios para poder correr y desplazarse libremente.
Necesidad de socialización.
El niño/a necesita relacionarse y comunicarse con otros. Planificaremos espacios de grupo y espacios individuales, espacios para compartir y espacios para tener tiempo para uno mismo.
Necesidades fisiológicas.
No pueden olvidarse las necesidades primarias en la vida del niño como son; la limpieza, alimentación, sueño, seguridad y descanso. Crear también espacios seguros, eliminando riesgos que puedan dañar al niño/a.
Necesidad de descubrimiento, exploración, conocimiento.
El niño/a se enriquece del entorno que le rodea. Se deben prever entornos ricos y estimulantes, que le ofrezcan la posibilidad de explorar y el descubrir.
el espacio debe favorecer y permitir la actividad lúdica del niño a través de la cual crece y se desarrolla. Dentro de la actividad lúdica, destacamos el juego simbólico, el cual se puede desarrollar a través de la propuesta de rincones donde el niño pueda experimentar de manera libre y espontánea con objetos diversos
Recomendaciones para crear espacios seguros (Ruiz Ruiz)
El mobiliario debe sen sólido, racional, que evite posibles accidentes y esté en función de la fisiología de cada edad y crecimiento.
La iluminación, tanto natural como la artificial habrá de ser correcta y suficiente para facilitar el trabajo.
Sería necesario contar con espacios abiertos suficientemente grandes que faciliten el recreo. el encuentro y el contacto con la naturaleza. En el diseño de estos espacios se tendrá en cuenta la relación armónica con el medio ambiente.
Los espacios de trabajo deben sen lo suficientemente grandes para que no se produzcan molestias por aglomeración.
Es importante conseguir un equilibrio en el nivel de ruido de los diferentes espacios para que facilite el clima de trabajo pretendido.
Es imprescindible dotar al centro de accesos adecuados que faciliten la circulación de alumnos disminuidos físicos y sensoriales.