La economía teotihuacana era fundamentalmente agrícola, con mucho intercambio comercial con las culturas vecinas durante su apogeo. El frijol, el maíz, el amaranto, los pimientos, tomates y cereales eran cultivados en terrazas mediante regadío, aunque este método se muestra insuficiente para sostener una metrópoli tan grande como prometió ser Teotihuacán en sus momentos cumbres.