El rey Marcos descubre a Tristan e Iseo y los condena a los dos a la hoguera. Al hacer esto, los busca separar con la muerte, y aunque no lo logra, cuando Tristan se escapa por la ventana, se separan los amantes. Después, Tristan vuelve a salvar a aseo, rescatándola de los leprosos, y la pareja se une nuevamente en el bosque de Mordrois.