Tambien investigadores explican que las características fisicoquímicas y organolépticas de los alimentos, es decir, aspectos como el sabor y la apariencia, dependen de la distribución interna del agua, los gases presentes, la conectividad y la movilidad de las partículas a través de los poros. Estos son los resultados obtenidos a priori tras estudiar los alimentos mediante técnicas en 3D.