Libros auxiliares Son libros que sirven para detallar en forma clara y precisa los registros de las operaciones
o transacciones desarrolladas por la empresa. Facilitan el análisis y verificación de los movimientos
en los libros mayores. Estos libros se deben llevar por cada una de las cuentas, tanto reales o de balance como
nominales o de resultado, en el nivel más apropiado para cada ente.
El número de cuentas auxiliares a utilizar está relacionado con el objeto social, el volumen
de operaciones o la necesidad de tener más detalle de cada transacción. Por ejemplo, se deben llevar libros auxiliares para cuentas del activo como: caja, bancos,
cuentas por cobrar a clientes, inventarios, propiedad planta y equipo; para las cuentas
del pasivo y patrimonio: obligaciones financieras, cuentas por pagar a proveedores y
capital; y para las cuentas de resultados: ingresos operacionales, gastos operacionales,
compras, etcétera.
■ Primera columna: para la fecha de la transacción.
■ Segunda columna: para anotar el detalle de cada transacción.
■ Tercera columna: número de comprobante.
■ Cuarta columna: para registrar los movimientos débitos.
■ Quinta columna: para registrar los movimientos créditos.
■ Sexta columna: para determinar los saldos de las cuentas.