MANIFESTACIONES CLÍNICAS:En el inicio brusco, el paciente tiene fiebre, escalofríos, cefalea, mareos, mialgias y dorsalgia (seguidos de náusea, vómito y bradicardia). La mayor parte de los pacientes se recuperan en esta etapa, pero en casi 15% de los casos la enfermedad evoluciona a una forma más grave caracterizada por fiebre, ictericia, insuficiencia renal y manifestaciones hemorrágicas. El vómito puede ser negro con sangre alterada