El nutriólogo debe poner todos sus conocimientos científicos y recursos técnicos en el desempeño de su profesión; De igual forma tendrá que conducirse con justicia, honradez, honestidad, diligencia, lealtad, respeto, formalidad, discreción, honorabilidad, responsabilidad, sinceridad, prioridad, dignidad, buena fe y en estricta observancia a las normas legales y éticas de su profesión.