Don Porfirio decidió encarcelarlo para evitarlo, pero Madero logró escapar y dirigirse a Estados Unidos, en el camino publicó el Plan de San Luis, llamando a la insurrección en contra de Díaz.
Aunque al principio Madero no recibió mucho apoyo, porque la Revolución no inició el 20 de noviembre de 1910 como él había convocado, algunos liderazgos se sumaron poco después, sobre todo en Chihuahua, que fue el centro de esa revolución: Francisco Villa, Felipe Ángeles y Pascual Orozco quien fue el líder militar más importante de esa parte de la Revolución, pero después fue menospreciado por Madero y acabó sumándose a Huerta; por eso no es considerado héroe nacional.