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APUNTES CRÍTICOS SOBRE LA POLÍTICA EN BOLIVIA
PRINCIPALES CORRIENTES DE PENSAMIENTO
El liberalismo modernizante (Alcides Arguedas)
Arguedas fue crítico radical de lo ancestral, de las tradiciones culturales y las mentalidades; señaló que los factores de la mentalidad colectiva pueden mantenerse activos durante periodos muy largos, y entonces determinan en alguna medida, difícil de precisar.
Enfatizo que los actores sociales carecerían de la facultad de desarrollar estrategias propias y fijar preferencias basadas en la elección consciente.
El telurismo nacionalista (Franz Tamayo)
Tamayo se acerca más específicamente a una definición de la esencia indígena es una concepción vitalista del orbe social.
El gran logro de Tamayo, es haber puesto al indígena como sujeto de la historia y haber superando la mentalidad que lo mantenía como mero objeto de políticas públicas, el crea otra imagen social boliviana, según la cual la “unidad social”.
El telurismo (Roberto Prudencio)
Su fundamento filosófico es el intuicionismo, que él contrapuso explícitamente a
los esfuerzos racionales sistemáticos.
Las concepciones racionalistas para explicar la evolución histórica le parecían construcciones artificiales y efímeras que no podían llegar a la esencia de las mismas.
Por ello sobrevaloró las civilizaciones precolombinas y el régimen colonial.
El conocimiento ganado por la pura intuición resulta ser el más valioso, porque perdura a través de todas las mutaciones teóricas y las revoluciones ideológicas. Se trata de un enfoque irracionalista y, al mismo tiempo, elitario
El Indigenismo (Fausto Reinaga)
Aquí el sentido de la identidad indígena no tendría que moldearse a la identidad general, sino generar o añadir un nuevo sentido común a la sociedad. No considera al indígena como parte de una clase social, o una raza. Convierte al indio oprimido en sujeto de liberación
Reinaga y las doctrinas de la descolonización que se basan en sus teorías menosprecian la civilización occidental moderna porque desconocen muchos rasgos fundamentales de la misma, especialmente su enorme diversidad y sus facultades de autocrítica.
Este desconocimiento del mundo occidental tiene paradójicamente un paralelismo en el conocimiento deficiente de la propia realidad boliviana de parte de aquellos que vislumbran en la obra reinaguista una iluminación para el propio pensar y actuar
El nacionalismo (Augusto Céspedes y Carlos Montenegro)
Los dos mayores representantes culturales del nacionalismo autoritario fueron Augusto Céspedes y Carlos Montenegro quienes, a su vez, tuvieron una destacada influencia sobre los intelectuales de la segunda mitad del siglo XX
Céspedes y Montenegro popularizaron exitosamente la dicotomía nación-antinación, que es similar a patria-antipatria, basadas ambas en la conocida contraposición amigo-enemigo, dicotomía que tiene hasta hoy una considerable eficacia en la praxis política y una curiosa relevancia en sectores intelectuales de toda América Latina, como lo atestigua la persistente Carl Schmitt.
Estas oposiciones binarias excluyentes definen a priori lo que es la verdad histórica y los fenómenos de la praxis.
El marxismo (René Zavaleta Mercado)
Zavaleta se ha convertido en un clásico de las ciencias sociales y sus escritos son indispensables para comprender la Bolivia contemporánea, sus mitos colectivos y sus anhelos de largo plazo.
El núcleo teórico de Zavaleta no ha sido el marxismo occidental o crítico que surgió en la primera mitad del siglo XX, sino una doctrina militante, que no admitía un cuestionamiento de sí misma y que se aplicaba por igual a todos los fenómenos naturales y sociales.
TRASCENDENCIA EN LA ACTUALIDAD
La diversidad de pensamientos han aportado
y han hecho presencia en el país tanto política e ideológica
En este sentido, esto implica una crítica a lo que ocurre en la actualidad
Algo para destacar es que los pensadores más antiguos estaban realmente preocupados por su gente y su país, por darles el lugar que se merecen tal es el caso de Tamayo y Reinaga, que querían unión y una reivindicación de las personas originarias.
la dicotomía nación-antinación, que es similar a patria-antipatria, basadas ambas en la conocida contraposición amigo-enemigo, dicotomía que tiene hasta hoy una considerable eficacia en la praxis política y una curiosa relevancia en sectores intelectuales de toda América Latina
Prudencio también deja una importante reflexión para esta cualidad y mundo que cree saberlo todo, que se encuentra sobrecargado de información, mencionando que el conocimiento ganado por la pura intuición resulta ser el más valioso, porque perdura a través de todas las mutaciones teóricas y las revoluciones ideológicas.
Un aspecto también para señalar que se vio reflejado en nuestra actualidad es los actores sociales que menciona Arguedas ya que carecen los mismos carecen de crear estrategias propias, estos se apropian de lo ya establecido haciéndolo pasar como propio, un ejemplo claro es Camacho apropiado de la revolucione de las pititas.
POSTURA DEL AUTOR ANTE EL DEBATE DEL DESTINO DE LA NACIÓN
Desde hace mucho tiempo se dice que la porción más interesante del quehacer filosófico en las sociedades ibéricas y latinoamericanas
se expresa mediante la literatura, las artes y la ensayística en ciencias
sociales
El autor asevera que Bolivia, en comparación con naciones
de magnitud poblacional semejante, ha generado notables productos en los campos
de:
la historiografía, la filosofía política y social y la literatura de la más alta
calidad
Este breve ensayo el autor hace un intento de recuperar la
notable producción intelectual que han generado estas tierras.
si se echa un vistazo crítico a la creación filosófica y sociológica en
la inmensa mayoría de los países de Asia, África y América Latina
comprueba que sólo los Estados con una población muy grande
pueden exhibir manifestaciones intelectuales comparables a las bolivianas
Donde nuestra sociedad no ha sabido o no ha querido apreciar de manera adecuada lo que se ha elaborado en aquellos campos que exigen un
cierto esfuerzo de comprensión
El pluralismo de ideas que todavía prevalece
en la opinión pública y en el ámbito intelectual del país.
Se puede percibir una actitud que combina la independencia política con la preservación de una considerable calidad intelectual.
Por ello, el autor cree que todavía hay un resquicio de esperanza
para el pensamiento boliviano
APUNTES CRÍTICOS SOBRE LA POLÍTICA EN BOLIVIA