El abandono del tabaquismo y del consumo excesivo de alcohol, así como el control de las enfermedades crónicas subyacentes, son un aspecto importante en la prevención de la NAC. No obstante, el pilar básico en la prevención es la vacunación frente al neumococo, el patógeno más frecuente, y frente al Influenza virus, responsable de infecciones respiratorias potencialmente graves, incluyendo la neumonía, y facilitador de infecciones por otros microorganismos más agresivos.