Las estrategias para ponerlo en práctica pueden ser los centros cívicos, bibliotecas públicas, centros de la administración pública, centros de la tercera edad, etc. Algunos grupos pueden ser objeto de atención especial: grupos de riesgo, mujeres víctimas de violencia de género, víctimas del terrorismo, personas adictas al consumo de drogas, personas que han perdido a seres queridos, personas que viven solas, personas mayores, etc.